lunes, 30 de diciembre de 2013

Acordes, tensión y distensión

En otro artículo dividimos los acordes en cuatro grupos, para simplificar su lectura: mayores, menores, aumentados y disminuidos, además de los de tipo sus o alt. Aquí, por su tipo de color, función tonal y el movimiento armónico que implican, podemos agruparlos en tres familias: mayores, menores y de dominante.

Acordes mayores


Tradicionalmente considerados como estáticos, así como de color alegre, optimista. Como ejemplo de acordes mayores en la tonalidad de D podemos citar: Dmaj7, D6, Dmaj9, Dmaj13, D6/9, Cmaj7#11, etc.



Acordes menores

Considerados estáticos y de color triste, melancólico, misterioso.  Como ejemplo de acordes menores en la tonalidad de G podemos citar: Gm7, Gm6, Gm9, Gm11, Gm13, Gm7b5, Gmmaj7, Gm6/9, etc.



Acordes de dominante

Considerados dinámicos. Crean una tensión que está esperando resolverse sobre un acorde estático. Como ejemplo de acordes de dominante en la tonalidad de A podemos citar: A7, A9, A11, A13, A7b5, A7#5, A7b9, A7#9, A7#5#9, A7b5b9, Adim7, A+7, A7sus, etc.



Esta agrupación nos ayudará a entender el concepto tensión/distensión, que ya vimos en Bajo Mínimos, sección Teoría, parte IX. En efecto, un acorde mayor o menor servirá para crear estabilidad, y un acorde de dominante nos servirá para alterar esa estabilidad en caso de necesitar movimiento. Análogamente, un acorde mayor o menor servirá para resolver ese movimiento o tensión.

Echemos un vistazo a la siguiente progresión de acordes (fig. 1), donde los cuatro primeros compases se repiten. Vemos cómo se van alternando, a cada compás, acordes estáticos y dinámicos. Empezamos de manera estable, compás 1; en el segundo compás se crea una tensión que se resuelve en el tercer compás; por último, en el cuarto compás se vuelve a crear tensión que se resuelve en el primero. Y vuelta a empezar. Esto hace que la progresión tenga movimiento y sea muy dinámica, al alternar tensión y distensión a cada compás.

Fig. 1

No siempre se desea tanto movimiento. En el siguiente ejemplo (fig. 2) vemos una progresión típica de blues, que podemos repetir hasta que nos cansemos, en la que usamos el símbolo % para indicar que el acorde no cambia. Los tres primeros compases son de estabilidad. Como vamos a cambiar a F6 en el compás 5, es bueno crear tensión en el 4 para luego resolverla. Lo mismo ocurre en la última fila. En los compases 9 y 10 creamos tensión para resolverla sobre la tónica (compás 11), y nuevamente tensión en el último compás antes de regresar al C6 y empezar otra vez.
Fig. 2

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Bajo Máximos te invita a comentar, ampliar o rebatir la información que acabas de leer